¿Cobardía?
-Me
encanta esa pintura.
-Es
“El almuerzo de los remeros”, de Renoir.
-Ah…
-Hago
una copia por año desde hace veinte años… Lo más difícil son
las miradas. A veces parece que cambian de expresión en cuanto me
doy la vuelta.
-Ahora
parecen felices.
-Naturalmente,
este año comen liebre con setas. Y los niños gofres con mermelada.
****
-¿Sabes?
Después de todos esto años, el único personaje que aún me cuesta
perfilar es la muchacha con el vaso de agua, está en el centro y,
sin embargo, está como ausente.
-Quizá
sea diferente a los demás.
-¿Eh?...
¿Y por qué?
-No
lo sé.
-Quizás,
cuando era niña no jugaba con los demás niños de su edad. Puede
que nunca jugara.
****
-Esa
chica del vaso de agua…
-¿Sí?
-Creo
que está distraída porque está pensando en alguien.
-¿Te
refieres a alguien del cuadro?
-No.
Quizá un chico con quien ella se cruzó y le dio la impresión de
que los dos se parecían.
-Ah,
o sea que ella prefiere imaginarse una relación con alguien ausente
que tener una con los que están a su lado.
-No
sé… Quizá sea lo contrario y ella se desvive por arreglar la vida
de los demás…
-¿Y
de ella? ¿De todos los desarreglos de su vida, quién se ocupará?
-En
mi opinión, es mejor dedicarse a los demás que a un nomo de jardín.
****
-El
otro día fui un poco duro con la chica del vaso de agua. Cuéntame,
el chico que se cruzó con ella el otro día… ¿le ha vuelto a ver?
-Creo
que no le interesan las mismas cosas…
-La
suerte es como el tour de Francia, lo esperas todo el año y luego
pasa rápido. Las oportunidades hay que atraparlas deprisa, sin
dudar.
****
-De
modo que es este hombre de aquí, el que alza la mano.
-Sí.
-Ya…
¿Está enamorada de él?
-Sí.
-Entonces,
ha llegado el momento de que ella se arriesgue de verdad.
-Eso
es lo que piensa. Está estudiando una estratagema para…
-Ya
entiendo, le gustan las estratagemas.
-Sí…
-En
realidad es una cobarde. Precisamente por eso me cuesta captar su
mirada.